CHILE, Los géiseres del Tatio.

    Se trata de ver amanecer en este campo geotérmico. Me levanto a las 04:00 horas. El cielo está precioso, no como en Madrid, donde nos lo han robado. Ya distingo la Cruz del Sur y Venus. El Campo geotérmico está a 4.300 metros de altitud, pero hemos tenido que ascender hasta los 4.600 metros para llegar por una pista que está sin asfaltar. La madrugada es fría en el desierto, unos 10 grados bajo cero, pero a mi me da la sensación que no es para tanto. El frío es seco y se soporta bien. Además voy abrigado. En el bus hay gente con problemas de mal de altura. Antes de salir, en el hotel, he tomado una infusión de coca. ¡Asintomático!

   Llegamos aún de noche y éstas son las primeras imágenes.

   

    El Volcán Tatio empieza a dejar pasar los primeros rayos y el espectáculo de géiseres y fumarolas cobra protagonismo.

      Restos de minerales que arrastra el agua en su huida del "averno" como el hierro y el azufre; y lo naranja me dicen, que son bacterias que viven en el agua a esa temperatura. Descendientes de aquellas primeras bacterias, que dieron origen a nuestro planeta. ¡Viva Riotinto!

 

       Desayunamos aquí mismo con huevos cocidos y café con leche calentada en las pozas calientes.

                      No son restos de basura abandonados... ¡Es nuestro microondas!

        

  La visita concluye. Son las 08:30 horas y un baño reparador de sueños nos espera en la piscina termal.

                              

                                                           El baño me ha dejado como nuevo.

                                         

              Por el camino de vuelta encontramos en el altiplano rebaños de vicuñas y a este zorro andino.

     Pienso que el zorro está al tanto de las visitas y a la espera de lo que caiga... "Nunca mejor dicho"

     A este tipo de grandes charcas con mucha vegetación y vida animal les llaman vados. Éste es el de Machuca.

                   

    

      El pueblecito de Machuca supongo que será de los más altos de Chile pues está a unos 4,000 metros. Sólo viven unas 10 familias y no hay niños. Prácticamente viven del turismo. Rota su trabajo cada tres meses. Uno se encarga de la iglesia, otros de las empanadas y de las broche tas de llama, otros de las plantas medicinales, de la artesanía. El nombre del pueblo me recuerda a una película chilena que refleja los momentos del Golpe militar contra el gobierno democrático de Allende.

     

Ya de vuelta voy descubriendo parte del camino que esta mañana no he podido ver, pues era de noche. Pasamos por una zona árida y seca, característica de los cardones

  

Hoy creo que toca siesta.