miércoles, 22 de mayo de 2024

Soria y sus huellas icnitas

 Tenía ganas de volver. Hace unos 30 años estuve por aquí con mi cuñado, que es riojano y controla esta zona. Fue una primera toma de contacto y además, hoy está mucho más cuidado. Eso me han dicho en Turismo de Soria.

                       Villar del Río, Bertrún, Santa Cruz de Yanguas, Yanguas y Enciso...
    Los yacimientos de la provincia de Soria se datan entre 140 y 128 millones de años. El ambiente se interpreta como el de una gran llanura fluvial con canales que podrían dar lugar a la formación de charcas temporales, desembocando, probablemente, toda la red hídrica en un lago de carácter perenne.
Geográficamente, se puede confirmar que el grupo de huellas soriano se localiza en las cuencas de los ríos Cidacos, Mayor y Alhama, por tanto forma parte del Valle del Ebro.




     La mayoría de estos sedimentos de la provincia pertenecen a especies de bípedos, dinosaurios que caminaban sobre dos patas; y tridáctilos, con tres dedos:
                               Terópodos (carnívoros) y Ornitópodos (comedores de plantas).
    

  Las huellas de los dinosaurios terópodos se distinguen por tener dedos largos y delgados que rematan en poderosas garras. Un ejemplo es el dinosaurio Triceratops

                                         

                        

Mientras que las de los dinosaurios ornitópodos presentan dedos anchos y cortos de perfil redondeado.
       Entre estos últimos, son numerosas las huellas de grandes herbívoros de la familia Iguanodón.

                  

Garras que parecen huellas de gallinas gigantes, icnitas tridácticas que corroboran que los grandes reptiles habitaron estas tierras hace 150 millones de años. 

 

                                                

   Las reproducciones a tamaño real de varios especímenes en algunas localidades de la zona me alertan  de que piso terreno de restos paleontológicos. aunque la figura de un Parasaurolophus en Garray esté en la carretera  a pocos kilómetros de la capital soriana.

                                             

                Los más significativos los encuentro en Villar del Río, Bretún, Santa Cruz de Yanguas y Yanguas, 

     

    Un enorme Braquiosaurio avisa que es uno de los puntos claves de esta ruta que estoy siguiendo. Un Estegosaurio,  un Iguanodón y un Triceratops, señalan los lugares que pisaron en el Cretácico un grupo de ejemplares de esta especie..
    A pesar que en los trípticos de la guía del aula paleontológica hablan de tortugas gigantes y grandes saurios, sólo he encontrado estas reproducciones.
                     

                      Oigo rugidos, hay gente corriendo... Parece que los dinosaurios se han enfadado.


                 Patas, ¿Para qué os quiero? En estos momentos esa frase de mi infancia cobra sentido...


Y colorín, colorado...

              

 

















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