viernes, 10 de agosto de 2007

CUBA, Las plazas de La Habana vieja


   
Hemos contactado con Gabriela una guía turística y licenciada en historia de Cuba para que nos haga un recorrido por las plazas más importantes de la ciudad vieja. En principio recorreremos la plaza de la Catedral, la plaza de San Francisco de Asís, la plaza Vieja y la plaza de Armas.

             

Plaza de la Catedral
                                                                                  En su origen, se le llamó Plaza de la Ciénaga...

     
 
   La Catedral San Cristóbal de la Habana es una edificación de estilo barroco, considerada de la corriente toscana por sus dos torres laterales con campanarios. Posee tres naves y capillas laterales. El piso es de mármol blanco y negro.

                               
     
     Hace mucho calor, a pesar de la hora y se agradece el fresquito de su interior.
  Ya dentro, en la parte superior del altar destacan sus frescos y la imagen de La Asunción. En una capilla lateral está San Cristóbal, patrono de la ciudad.
   En la Catedral se encuentran varias tumbas de obispos y personajes ilustres de la ciudad y de Cuba. En ella estuvieron depositadas las cenizas de Cristóbal Colón, hasta el fin de la dominación española en la isla.


Museo de arte Colonial, en la parte opuesta a la catedral
    Es un edificio sin portal y con dimensiones algo menores que las otras viviendas. El patio y los corredores que hoy lo cierran por sus cuatro lados, fueron reedificados en la segunda mitad del siglo XIX. Ostenta una larga historia de ocupantes a partir del año 1622. En 1726 vivió en ella su más importante propietario, el teniente coronel don Luis Chacón, que ocupó el cargo de gobernador civil y militar,
   En 1969, después de ser una casa restaurada, se inauguró en ella, el Museo de Arte Colonial.

     

Palacio del Conde Lombillo, en uno de los lados de la plaza El palacio perteneció a la familia habanera Pedroso, pero tomó su nombre del Conde Lombillo, cuando José Lombillo se casó con una de las descendientes de la familia Pedroso a finales del siglo XIX. ¡Buen braguetazo , Lombillo!
  Este palacio fue construido en 1741. Antiguamente funcionó como oficina de correos y como Museo de Pedagogía Cubana en los años de la alfabetización de los pobladores de la isla. A partir de 1947, fue sede del Archivo Histórico Municipal Habanero, la Biblioteca Histórica Cubana y Americana y el Museo de la Ciudad de la Habana .
   En la actualidad, ha vuelto a ser la sede de la Oficina del Historiador de La Habana Vieja

 

Palacio del Marqués de Aguas Claras, en el otro lado.
 Este palacio de estilo barroco fue la sede del Banco Industrial antes de la Revolución Cubana y, actualmente, aloja en su interior el Restaurante El Patio, especializado en comida cubana y cócteles. Ahora no lo visitamos, el restaurante digo...tal vez, al atardecer.

               

Callejón del Chorro
   La Habana de siglo XVI era una ciudad en expansión que carecía de un regular suministro de agua potable. Se creó entonces la llamada «Zanja Real», un canal excavado en el suelo con más de 11 kilómetros de largo que llevaba el agua desde el río Almendares, antes de la Chorrera, hasta el interior de la ciudad poblada. En esta foto se ven los restos de la primitiva zanja real.

                          

   En su época fue la obra ingeniera más importante de la villa, pues constituyó el primer acueducto realizado por los españoles en el Nuevo Mundo. Llegaba, inicialmente, a cuatro fuentes Una de ellas se encontraba, precisamente, en el Callejón del Chorro. Desde allí la conductora se bifurcaba en tres ramales que conducían el agua hasta las tropas del puerto, las fortalezas y el ganado de las inmediaciones.



La Plaza de San Francisco  

             

   El nombre de esta plaza de San Francisco se debe al convento de San Francisco de Asís ubicado en este lugar desde finales del siglo XVI .Desde el XVII las aguas de la bahía de La Habana se adentraban en esta zona de la actual plaza, hasta las calles de la ciudad vieja. La autoridad acordó hacer una plazoleta, muy cerca de la Aduana, por la necesidad de abastecer de agua a las armadas y las flotas, además de disponer de un espacio para depositar las mercancías desembarcadas y así no obstruir la calle.
Construida al estilo barroco allí residió el Gobernador y la aristocracia habanera. En ella se instalaron archivos e instituciones gubernamentales que permanecieron desde finales del siglo XVII hasta que se trasladaron a la Plaza de Armas en el XVIII
Hoy es uno de los lugares más bellos y concurridos, donde algunas jóvenes que cumplen 15 años y las parejas que se casan, se fotografían aquí en busca de su paisaje.
                              
 
    
     Fuente de los leones
   En XIX se instaló en la plaza la fuente de los Leones. Esta bella fuente está compuesta por cuatro pedestales de mármol de Carrara que sostienen a igual número de leones echados, alcanzando una altura de 2,5 metros. En el centro de la fuente se alza una columna de 1,5 metro de alto y 0,45 de diámetro coronada con una corola que vierte el agua.


Lonja del comercio y cúpula.
  El origen de la Lonja es de finales del XIX cuando los comerciantes marítimos se organizan para las reuniones que efectuaban en el mismo muelle para examinar y poner precio a sus productos se realicen en un lugar más apropiado. Es un edificio de seis plantas, con un amplio portal con arcadas y una cúpula con la figura de Mercurio, el dios del Comercio.


        El caballero de París
    Es una estatua de bronce que representa a una persona que deambulaba por la ciudad con traje y capa negra, su pelo canoso y alborotado y varios libros y periódicos bajo el brazo. La vida de este hombre estuvo llena de contratiempos que lo fueron trastornando mentalmente, por eso hacía discursos incoherentes y tenía delirios de ser un gran personaje. Se supone que perdió la razón cuando fue arrestado en 1920 y encarcelado en la prisión del Castillo del Príncipe, por un crimen que no había cometido. Muchos turistas que van a ver su estatua tocan su barba... ¿Qué buscarán? ¿Volver a La Habana? Lo de siempre...

                               

El Cruceiro 
 Los cruceiros formaban parte de la tradición cultural franciscana. Solían erigirse cerca de los núcleos urbanos y señalaban un punto de encuentro. Este cruceiro llegó hasta La Habana desde la lejana Galicia. ¡Buen camino!



                                                                          La Plaza Vieja

         

  Tenemos la suerte de contemplar la plaza desde lo alto, desde la casa de unos amigos de Gabriela En sus comienzos como Plaza, se le llamó Plaza Nueva, allá por el XVI. No se construyó en ella ningún edificio religioso ni militar. En la plaza se congregó lo más selecto de la burguesía criolla, hasta el XVIII. Posteriormente la plaza entra en una etapa decadente hasta que a finales del XX es reestructurada, tal como hoy se ve.


  

           

              



       La Plaza de Armas

              

      En su origen, en este espacio abierto junto a la bahía, se encontraban los bohíos de los primeros vecinos, una iglesia de piedra y tejas, y el castillo de la Real Fuerza, destinado a la defensa de las incursiones piratas. En el castillo se proyectó esta plaza de Armas.
A finales del XVIII, el Gobernador y Capitán General de la isla, propone al Cabildo el plan concertado de reconstrucción de la Plaza de Armas.
   La Plaza de Armas se convirtió en el centro cívico de la población, gracias a las transformaciones de que fue objeto, que incluyeron, la terminación y la construcción de los dos edificios públicos más relevantes de la época colonial: la Real Casa de Correos, más conocida como el Palacio del Segundo Cabo y el Palacio de los Capitanes Generales, que ocupa todo el lado Oeste, donde se alzaba la iglesia que fue dañada severamente en el año 1741 por la explosión del navío “El Invencible”, por tal motivo fue demolida.

                                        
 
   En la Plaza de Armas se han realizado muchas obras de reconstrucción y revitalización, como: el adoquinado de sus calles ( a propósito, algunos adoquines son de madera), el Instituto del Libro, el Museo de la Ciudad de La Habana, el Museo Nacional de Historia Natural, el Templete, el hotel Santa Isabel, la apertura de servicios a la población como el restaurante La Mina, la Casa del Agua, la Casa de la Natilla, entre otros.
   

Real Fortaleza
  El Castillo de la Real Fuerza es la fortaleza más antigua de todas las Américas. Fue construido entre 1558 y 1577, en el mismo lugar donde se encontraba un fuerte que fue destruido por corsarios franceses durante 1555.En el año 1762, la fortaleza logró mantener la ciudad a salvo de un ataque de la Corona Inglesa. El castillo se encuentra rodeado por un impresionante foso, donde está el Museo de Navegación.


     La torre oeste está coronada por la copia de una veleta de bronce llamada La Giraldilla, la escultura de cobre conocida más antigua de Cuba. La original se encuentra en el Museo de la Ciudad.
    También en el Museo se encuentra esta maqueta de la Fortaleza.

           
El Templete
El Museo El Templete es una pequeña capilla dórica, de estilo neoclásico, que simula el aspecto de un Templo Grecorromano y conmemora la fundación de la ciudad de La Habana, hace prácticamente 500 años. Esta capilla fue construida en 1828, en el mismo lugar donde se celebró la primera misa de La Habana, debajo de una ceiba, en noviembre del año 1519. La tradición habanera dice que en su jardín, debes dar tres vueltas alrededor de la ceiba, lanzar una moneda al aire y pedir un deseo, ¡Lo de siempre, pero caminando! La capilla está rodeada por un pequeño jardín, con un monumento en honor al Almirante Cristóbal Colón.
             
 

Palacio Conde de Santovenia 
 Desde mediados del XX este palacio fue reconvertido en un hotel de lujo, el Hotel Santa Isabel


    Palacio de los Capitanes Generales
   Este palacio, ejemplo de arquitectura barroca cubana, es de la década de 1770 y fue construido en el mismo lugar donde se encontraba la iglesia original de La Habana. Entre 1791 y 1898, fue la residencia oficial de los capitanes generales españoles, de ahí su nombre.


  
El Museo de la Ciudad se encuentra instalado en lo que era el Palacio de los Capitanes Generales.
El museo posee un hermoso patio central adornado con una estatua de mármol blanco de Cristóbal Colón que data de 1862.

          

    El museo cuenta con más de 40 salas de exposiciones permanentes. A mi me llaman más la atención las dedicadas a la Giraldilla, la sala de los uniformes españoles y la sala de la Cuba Heroica. Ahí tenéis a Don Cristóbal.
                                                                                           Maqueta de la ciudad
                                                     

  
En el exterior una exposición de libros de segunda o tercera mano... muy concurrida , por cierto. El parque Céspedes que empieza a invadir la fotografía. Le pregunto a Gabriela por este tal Céspedes, un prohombre de la Isla, intelectual y político independentista de la Corona española.

                                

 
 Palacio de Segundo Cabo
    La bella mansión fue creada por interés del Marqués de la Torre, entonces gobernador de la Isla, quien deseaba rodear con cuatro grandes edificaciones la Plaza de Armas. Se erigió para ser la residencia del Segundo Cabo, mano derecha del Capitán General,
Construcción de estilo arquitectónico “barroco cubano”, realizada entre 1772 y 1790. Está construida de piedra caliza. Destaca el amplio portal, con ocho anchas columnas rematadas en arcos de medio punto y los balcones del piso superior con todas sus ventanas azules y blancas.



    
Con los años ha tenido varias funciones. Fue la Administración General de Correos, luego el Senado, el Tribunal Supremo e incluso más recientemente, la sede del Consejo Nacional de Cultura, de las Academias de Historia, de la Lengua y de las Artes, y del Instituto Cubano del Libro.
   Hoy es parte del proyecto «Rescate patrimonial y desarrollo cultural en La Habana», perteneciente a la Oficina del Historiador de la Ciudad. Pretenden que en pocos años se convierta en un museo interactivo de ver y tocar... El Palacio del Segundo Cabo es una de las tres obras más relevantes de la arquitectura colonial cubana junto al Palacio de los Capitanes Generales y la Catedral.

                                                                            Museo de Historia Natural
                 

 
Parque Céspedes
En 1868, Carlos Manuel Céspedes fue el líder cubano, que promovió el levantamiento de los esclavos contra la dominación española. En este parque se le rinde memoria.


   
Gabriela nos ha hecho pasar una mañana histórica y entretenida. Me ha encantado su forma de ayudarnos a entender un poco mejor esta zona de La Habana vieja...

No hay comentarios:

Publicar un comentario