Creo que toda la catedral es en sí misma un Museo, sólo hay que darse un paseo por las capillas del interior. El ticket de entrada incluye una visita al Museo catedralicio. Y hacia él me dirijo cruzando el Claustro. Estos elementos son los que más me han llamado la atención:
Relieve del Descendimiento, que se esculpió para el retablo mayor, aunque nunca fue colocado.
Díptico del Calvario y la Piedad, excelente pintura de Pedro Berruguete.
El Martirio de San Sebastián, obra de El Greco, una de sus pinturas más destacadas, y sin duda la obra maestra de cuantas guarda la catedral.
Escultura de Santa Ana Triple ( tres en uno qué curioso), obra del año 510.
Y todos estos tapices en la sala capitular...
El claustro
Algunos ventanales tienen unas vidrieras en mal estado, que me parecen antiguas... No veo ningún cartel en el que me pueda informar. Bueno, y se acabó la visita. Me voy contento. Hoy he aprendido algo más.
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